Te amo con locura mía,
locura que un día mi alma calló,
pues al abrirse, solo fue mal entendida
y sólo te causó confusión.
Te amo aunque el tiempo pase,
y la sombra de la experiencia aparezca
y permita creer que uno olvidó.
Te amo desde adentro, así con fuerza,
una fuerza tan inmensa
y un dolor del corazón.
Te amo siempre con locura,
con la intensidad aquella que un día te amé.
Aquella que poco recuerdas,
pero que tu alma sabe y empieza a reconocer.
¡Despierta alma, despierta ya!
Que tenemos como límite solamente el cielo.
Despierta para que al tú despertar
nos hagamos uno, nos volvamos a amar.