Hay momentos en que respiro esa melancolía ardiente
que quema mi interior y se adentra en mi plenamente…
Hay veces en que el recuerdo, de mí hace presa
y me quedo pensando, rayando en el silencio,
observando, tan solo observando mi callado recuerdo,
ese que se convierte en aroma y se acerca a mi respiración
tan solo para decirme: “No te olvido, aquí estoy”
Son momentos de entrega, de dolor,
de muerte, de entera desolación…
eterna y horrible sensación que cuando me toca
me hace presa dejándome sin aliento.
Presa, presa, me haces presa melancolía cruel
eterna compañera
no te cansarás de ser parte de mi
de vivir tan plena…
Ya no quiero sacarte de mi pobre existir
ya no quiero enterrarte y olvidarme de vos.
Hoy acepto que te llevo tan adherida a mi,
hoy te acepto y te amo, hoy te acepto y me amo
aún con toda tu cruel sensación.
Responder