
Amada, hoy al mirarte me reencuentro conmigo misma, me veo en tus ojos y descubro a un alma que había permanecido dormida por tantos años.
Te veo y el descubrirme es recordar mi esencia, recordar mi aroma, recordar el verdadero ser que soy.
Te veo y en ese mirarte, me lleno de luz, de tu energía que me abraza y me traspasa y que trasciende este espíritu que soy.
¡Oh, amada mía! Reconocerte, mirarte, escucharte y sentirte le ha traído vida al corazón que no latía, le ha traído esperanza y certeza a la seguridad que hacía falta.
¡Oh, querida mía! Gracias por dejarte fluir y permitirme reconocer la verdad que mora en mí.
Me encantó! Gracias amigo 🤗